Los rayos de luz atravesaban tenuemente los cristales de las ventas hasta besar las suaves corolas de las magnolias  que se veían apocadas por su belleza. Si estas flores hablaran manifestarían sin dudas su recelo, nadie jamás fue tan hermosa… nunca  nadie  fue tan perfecta ante los ojos humanos y dioses. Las ninfas de toda la tierra llegaban a sus ventanas para perderse en el terciopelo que era su piel y en la rosa de sus labios.

Belleza, extraña y ansiada belleza. Cruz pesada cruz… cruel  yugo.

Se despertó, con sus finos dedos inundados de gracia acomodó su cabellera, estaba algo ida como fuera de este mundo. Estiró su  mano tomó  un chino y mientras lo encendía contemplaba su cuerpo desnudo en el espejo. Todo era perfecto, cada momento de su vida apuntaba a lo que hoy sería la culminación de su propia obra de arte.

Las personas jamás comprendieron su arte, el noble propósito de ser bella y llevar al punto máximo su don. Algunos eruditos, esos que no tienen la sensibilidad o la preciada luz en sus mente que permite apreciar el arte  (ese tipo de persona que no sabe valorar la belleza de Mozart, un Monet y jamás comprendieron  Un Tranvía Llamado Deseo o simplente se aburren con Fellini) la tildaban de loca, superficial o enferma y habían tratado de arruinar su trabajo de años otros en cambio solo la etiquetaban como superficial. No era superficial pobres seres  que no alcanzan a comprender su noble propósito, cada persona que mira su rostro en la calle tan solo un segundo entre la multitud de transeúntes quedaban como suspendidos en al nada admirándola… eso no es arte? Qué es el arte si no es belleza?  No trataron los grandes artistas de encontrar la belleza en cada momento de su vida y transmitirlas a las personas incluso en lo más “obsceno” y “vulgar”? Enfermos esos que la juzgan, porque no tienen alas en sus mentes y no pueden ver un propósito mayor. No era anorexia, no es bulimia tampoco es hedonismo, no trataba busca  atención de un padre ausente.  Cómo no pueden entender esto?!

Mientras acomodaba los jarrones inundados de flores y  encendía velas para dar un clima más romántico a su cuarto, seguía pensando y reafirmando sus decisiones.

Ya en su vestidor tomó un vestido blanco, creo yo tejido y bordado por las arañas que en secreto la amaban, se lo puso pero ninguna prenda era suficiente para enmarcar su ser. También arregló su pelo sacó el anillo de su dedo y lo dejó  a la orilla de la cama.

Arte vivir por él. Nada es casual hoy, cada detalle está planeado la satisfacción de sus ojos lo denota. Se recuesta en el doga y extiende su mano par a tomar la fina daga que yace inerte sobre el suelo, su mando de plata tiene escrita la palabra Oblivion por algún motivo que desconozco. Al verla ahí en el suelo es como si la llamara a gritos y solo cuando estaba en sus manos encontraba el silencio tan deseado. Los ojos de la joven se elevaron al cielo y sin mirar tomo la cuchilla… todo se suspendió y el tiempo comenzó a transcurrir más lento de lo normal… la tierra comenzó a rotar lentamente. Miró el filo  de la cuchilla  y sin dudarlo cortó su  muñeca. El dolor la invadió pero este la purificaba de esta forma todo se tornaba más claro… cortó su muñeca. Vio la sangre brotar lentamente de su cuerpo manchando el vestido. Todo era demasiado nítido,  la obra había sido consumada. Mientras lentamente se perdía en los laberintos de su  mente para ir  despegándose de la vida comenzó a llover y sonrió.